Las llagas, también conocidas como aftas bucales, son pequeñas lesiones o úlceras en el interior de la boca que pueden aparecer en las encías, la lengua, el paladar blando o en la parte interna de los labios y mejillas.
Por lo general, las llagas en la boca son dolorosas y dificultan las actividades cotidianas como la masticación, la ingesta de líquidos o la capacidad para hablar.
Por ello, desde Pequeciro te contamos las causas principales de las llagas en la boca y algunos consejos para prevenirlas.
¿Cuáles son los principales motivos por los que salen llagas en la boca?
Traumatismo
La aparición de llagas en la boca por traumatismo es mucho más común de lo que parece, ya que se producen por lesiones que nos provocamos en el día a día:
- Un mordisco accidental en las mejillas, los labios o la lengua, durante la masticación de alimentos o mientras hablamos, puede provocar el brote de llagas en la boca.
- El impacto al golpearnos en la boca durante una caída o la práctica de un deporte de contacto puede provocarnos llagas en la boca.
- Un cepillado dental agresivo puede irritar la mucosa oral, contribuyendo a la aparición de llagas en la boca.
- El roce de las prótesis dentales que no encajan correctamente es otra de las causas de las llagas en la boca.
Infecciones virales o bacterianas
Las llagas en la boca también pueden aparecer por infecciones presentes en el organismo. Los virus bajan las defensas, debilitando al sistema inmunológico. En este estado, el cuerpo es más propenso a desarrollar heridas. Por ejemplo, aquellas personas que padecen VIH o diabetes, entre otras enfermedades víricas, suelen padecer llagas en la boca.
Alergias alimentarias
Las alergias a ciertos alimentos, medicamentos y productos de higiene bucal pueden provocar la irritación e inflamación de la mucosa oral, y como consecuencia, llagas en la boca. Los cítricos, las nueces, el chocolate o los mariscos son algunos de los alimentos que más reacciones alérgicas suelen desencadenar. Respecto a medicamentos, aquellos que suelen producir llagas en la boca son los antibióticos, analgésicos y medicamentos para la presión arterial.
Estrés
En épocas de estrés crónico, es normal que aparezcan llagas en la boca. Esta tensión física y emocional debilita el sistema inmunológico; genera hábitos nerviosos, como morderse los labios, las mejillas o la lengua; y cambios hormonales que alteran el equilibrio de la flora bacteriana provocando llagas en la boca.
Deficiencias nutricionales
Existen una serie de nutrientes esenciales para la salud de los tejidos bucales: vitamina B12, ácido fólico y zinc. La vitamina B12 se encarga de mantener la salud de la mucosa oral y el sistema nervioso, mientras que el ácido fólico regenera las células y repara los tejidos de la cavidad oral. Por otro lado, el zinc favorece la cicatrización de las heridas. La escasez de estos nutrientes puede causar dolores y molestias mayores que las llagas en la boca.
Consejos para prevenir las llagas
La mayoría de las personas que sufren llagas en la boca suelen padecerlas a menudo. Sin embargo, desde Pequeciro te damos una serie de consejos que te ayudarán a prevenir su aparición:
- Sigue una rutina de higiene oral sin productos abrasivos: cepíllate los dientes al menos dos veces al día, con un cepillo de cerdas suaves y un dentífrico con ingredientes activos suaves. De esta manera, disminuirás las posibilidades de padecer llagas en la boca.
- Evita el tabaco y el alcohol: estas sustancias pueden irritar la mucosa oral y favorecer el desarrollo de llagas en la boca. Intenta reducir su consumo lo máximo posible para mantener una boca saludable.
Aunque las llagas en la boca suelen sanar por sí solas, en algunos casos pueden ser recurrentes o indicar un problema de salud subyacente. Por ello, es importante prestar atención a su aparición y buscar un odontólogo infantil si es necesario.
En Pequeciro somos expertos en el cuidado oral de los más pequeños. Si tu hijo es propenso a sufrir llagas en la boca, acude a nuestra clínica dental en el barrio Salamanca. Encontraremos la mejor solución para él. ¡Pide cita!
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