Cuando los niños cumplen los 6 años llega el momento de conocer al Ratoncito Pérez. Empiezan a caerse los dientes de leche y a salir las nuevas piezas permanentes. En Pequeciro recomendamos que, a partir de esa edad, visiten por primera vez a un ortodoncista para que pueda realizar un control y una evolución del proceso hacia su nueva sonrisa.
Durante esta etapa es posible que, debido a la erupción de los dientes, el niño desarrolle una serie de problemas estéticos y de funcionalidad que deben corregirse cuanto antes. Diagnosticarlos en edades tan tempranas será muy beneficioso para su salud y facilitará mucho el tratamiento.
La ortodoncia infantil va más allá de la estética
Uno de los problemas que pueden afectar a los niños está en su mordida. Puede ocurrir que la mandíbula y el maxilar no encajen, dando paso a lo que se conoce como maloclusión.
Existe un aparato dental para corregir la mandíbula y el maxilar de los pequeños a tiempo, para que su mordida encaje y no se generen problemas más graves en un futuro: la ortodoncia interceptiva.
¿Qué problemas puede solucionar en la mordida?
Una maloclusión puede darse de distintas formas. Dependiendo de si afecta a la mandíbula o al maxilar se puede diferenciar entre estos tres tipos de problema en la mordida:
- Sobremordida. Ocurre cuando los dientes superiores cubren un tercio o más los inferiores. Esto desencadena una serie de factores estéticos y funcionales como la sonrisa gingival -en la que se muestra gran parte de la encía- o el desgaste de los dientes.
- Mordida cruzada. El maxilar es más estrecho que la mandíbula, por lo que los dientes superiores quedan escondidos en los de abajo. Esto también puede ocasionar un desgaste dental, además de problemas al masticar o hablar y bruxismo.
- Mordida abierta. Sucede cuando los dientes de arriba y abajo no tienen contacto en algún punto de la sonrisa. Puede generar ceceo al hablar y problemas al masticar.
Para estas maloclusiones, el aparato dental para corregir la mandíbula y el maxilar será una buena solución para que en un futuro no se desarrollen problemas más graves vinculados a la salud general.
Como expertos en ortodoncia infantil en Madrid, en Pequeciro recomendamos que, si ves en tu pequeño alguno de estos signos de maloclusión, visites nuestra clínica en el barrio de Salamanca. Nuestros expertos en ortodoncia podrán valorar su caso y ver si es necesario colocarle un aparato dental para corregir su mandíbula y su maxilar. Estaremos encantados de asesorarte, ¡pide cita!
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